Las consecuencias de una perturbación no siempre son visibles e inmediatas. El debilitamiento de un componente debido a una sobretensión puede provocar una reducción de la vida útil del material, o una avería «diferida». A partir de ese momento, el usuario puede no establecer el vínculo entre la avería y la causa real. Se precipitará a establecer un diagnóstico equivocado y, por lo tanto, procederá con un tratamiento inadecuado del problema.
Los efectos de las sobretensiones sobre los equipos electrónicos son de varios tipos, por orden decreciente :
Destrucción
• Destrucción de las conexiones semiconductoras por sobretensión
• Destrucción de las metalizaciones de los componentes
• Destrucción de las pistas de Circuitos Impresos o de los contactos
• Destrucción de los Triacs/Tiristores por dV/dt.
Perturbaciones de funcionamiento
• Funcionamiento aleatorio de los tiristores o triacs
• Memorias que se borran
• Error o bloqueo de programas informáticos
• Error de datos o de transmisión
Envejecimiento prematuro
Los componentes expuestos a las sobretensiones tienen un tiempo de vida reducido.
Las consecuencias de las sobretensiones en las instalaciones son reales, debido a esto las normas actuales sobre instalaciones eléctricas obliga a instalar supresores de transientes (DPS) en algunos casos específicos.
